Tal como en
2015, aunque ahora con una situación mucho más grave que entonces, el
presidente del Fútbol Club Barcelona, Josep María Bartomeu, se encuentra
acorralado por su propia comisión directiva, que en buena parte le plantea
dejar su cargo ya mismo o llamar a elecciones (previstas para mediados de 2021)
de manera anticipada, luego de que estallara el “Barꞔa-Gate” por el que se supo
que el club contrató en 2017 a una empresa de marketing digital que manejaba
cuentas que desde las redes sociales atacaban a dirigentes opositores,
empresarios mediáticos, ex jugadores como Xavi Hernández y Carles Puyol, y
hasta involucraron a Lionel Messi y a su esposa Antonella.
Muchos
recordaron entonces que una situación parecida (aunque todo indica que de menor
gravedad institucional) ocurrió en 2015 cuando el equipo cayó en la Liga
Española en San Sebastián ante la Real Sociedad y se habló de una crisis entre
Messi y el entrenador Luis Enrique, que motivó el alejamiento del director
deportivo Andoni Zubizarreta y se insistía en un adelantamiento electoral, que
ocurrió, pero con el triplete (Liga, Copa del Rey y Champions League) la jugada
le salió bien a Bartomeu y éste consiguió la reelección.
Esta vez, la
situación parece extremadamente grave porque si ya había severos
cuestionamientos a la comisión directiva por una serie de acciones (la salida
de Neymar al PSG en 222 millones de euros utilizados en gran parte para
contratar a Philippe Coutinho –ya en el Bayern Munich- y Ousmane Dembélé –quien
arrastra varias lesiones y se perderá el resto de la temporada-; el video en el
que Antoine Griezmann anunció en 2018 que se quedaba un año más en el Atlético
Madrid cuando ya lo esperaban en el Barcelona, la falta de planificación que
determinó un plantel muy corto para afrontar lo que resta de temporada), se
agregaron en los últimos días unas desafortunadas declaraciones del director
deportivo y ex jugador, Eric Abidal, y especialmente, la difusión de la
contratación de las cuentas difamatorias desde una empresa de marketing
digital, por lo que el club pagó 990.000 euros, aunque en cinco pagos anuales
de 198.000 desde 2017, lo cual implica que al ser la cifra inferior a los
200.000, no era necesario dar cuenta a los pares de comisión directiva, como
acepta el estatuto.
Bartomeu, que no
puede volver a presentarse a elecciones, es presionado por los propios
dirigentes que están molestos por no haber sido consultados a la hora de un
pago tan alto (además, muy por encima del costo que se calcula, que se estima
en 50.000 euros totales) y que ahora le exigen responsabilizarse, prometió un
estudio pormenorizado de los hechos al contratar a una empresa internacional,
afirmó que rescindió contrato con la empresa de marketing digital que manejó al
menos una cuenta de las difamaciones, y por si fuera poco, no parece que los
capitanes del equipo de fútbol, Messi y Gerard Piqué, les hayan creído en sus
explicaciones (el crack argentino afirmó horas más tarde que le pareció
“raro”).
El barcelonismo
se había sacudido el pasado martes cuando el programa “Que T’Hi Jugues” de la
Cadena SER de Cataluña difundió que el club había contratado a través de Jaume
Masferrer, mano derecha de Bartomeu y jefe de Gabinete de la Presidencia, a la
empresa española “I3 Ventures”, en noviembre de 2017, a cargo del uruguayo
Carlos Ibáñez y con sede en Madrid y que esta compañía de marketing digital,
asociada a la empresa Nicestream manejaba cuentas en redes sociales (se habló
de seis, “Respeto y Deporte”, “Mes que un Club”, “Alter Esports”, “Justicia y
Diálogo en el Deporte”, “Sport Leaks” y “Jaume un film de terror”, que
funcionaban en Twitter y Facebook).
La operación de
contratación de “I3 Ventures” (fundada en 2015), indicó la Cadena SER de
Barcelona, se llevó a cabo en Buenos Aires, donde esta empresa está vinculada a
otra llamada “Illuminati Lab”. Si primero Bartomeu negó la información, en la
medida que aparecieron las pruebas, Ibáñez terminó aceptando, en la única
entrevista que concedió, al programa “El Matí” de Catalunya Radio, que “sólo”
manejó la cuenta de “Respeto y Deporte” y que “no somos (Edward) Snowden
(consultor tecnológico y ex empleado de la CIA que desveló documentos secretos de alto valor en el resonante caso
“Wikileaks”)”.
Experto en Big
Data y marketing digital y que según su perfil de Linkedin, Ibáñez está ligado
también a empresas como “Eye Watch” y “NSG Corp”. y tiene experiencia en haber
participado en campañas políticas en Sudamérica con el mismo sistema de uso de
cuentas en redes sociales. “I3 Ventures” tiene la misma dirección que
Nicestream en Madrid (Calle Zurbano 10) y en Argentina se asoció en “Illuminati
Lab” en su momento con Gastón Douek, aunque éste sostiene que se desligó en
2014.
Las cuentas,
según informó la Cadena SER de Barcelona, en un dossier de 36 páginas, hacían
hincapié en que hay jugadores acomodados y frustrados en el plantel (algo muy
parecido a lo que adujo Abidal en una entrevista con el diario “Sport” como
motivo de la separación del cargo del entrenador Ernesto Valverde), también en
que Messi no renueva su contrato (vence en junio de 2021) porque está pagado
por el empresario mediático Jaume Roures (dueño de Mediapro y quien está
montando un parque temático sobre el crack rosarino en China por decenas de
millones de dólares), que Piqué abandonó sus ideales políticos para
españolizarse por sus intereses en la organización de la Copa Davis, que Xavi
Hernández está manejado por el dirigente opositor en las próximas elecciones,
Víctor Font, y se atacó al propio Font, así como al ex presidente azulgrana
Joan Laporta y al entrenador Josep Guardiola. Los reportes al club se hacían
cada quincena.
Bartomeu negó
todo el martes, al mejor estilo Joaquín Sabina, en la entrega del premio Mario
Vázquez Montalbán de periodismo (“El Barca no ha contratado a ningún servicio
para desprestigiar a nadie, ni a ningún jugador, ni a ningún político, ni a
ningún directivo ni a ningún ex. Es rotundamente falso”), y aunque anunció la
rescisión del contrato con “I3 Ventures”, tampoco convenció a la mayoría de sus dirigentes
el miércoles (Didac Lee, el responsable del área digital del club, no sabía
nada de lo ocurrido justo cuando su equipo había presentado un proyecto de
estrategia digital del club), ni al plantel, cuando lo visitó en el
entrenamiento por segunda vez en menos de un mes, para aclarar las cosas.
“Que se contrate
una agencia o consultora para motorizar sus redes sociales y crear contenido es
algo habitual. Lo que es menos habitual es que el encargo sea erosionar o
menoscabar la imagen de rivales, competencia o jugadores”, sostiene Miguel
Pereira, director de la consultora “Darwin Social Noise”, especialista en
marketing digital, quien agrega que le llama la atención que en el informe “se
utilizan palabras como “influir”, “reputación” o “intervención”, que parecen
inquietantes. Cuando motorizas no intervienes, lo único que haces es utilizar
herramientas digitales para escuchar la conversación digital y manejar informes
y grandes volúmenes de datos”.
Por su parte, Ibáñez se defendió sosteniendo que “el
encargo (del Barcelona) en ningún momento fue el de crear contenidos negativos
no positivos. Nuestra tarea consistía en motorizar toda la actividad de las
cuentas del Barꞔa. No generamos contenidos. Y el informe que circula sobre una
campaña para desacreditar a Víctor Font (candidato opositor a las elecciones de
2021) no es nuestro, no ha salido de nuestra compañía, es falso” y que la
página de Facebook “Respeto y Deporte”, que aparece como asociada a su empresa
“I3 Ventures” “no es nuestra, sólo registramos un dominio. Es como si ustedes
tienen un garaje y alquilan una plaza a alguien, pero el coche no es suyo. Es
una cuenta que genera opinión, pero no
insulta ni hace apología del delito ni publica noticias falsas” y que las otras
cinco cuentas “no son mías” y que “cometimos una falta al no informar a nuestro
cliente de ciertos aspectos”, aceptando la extinción del contrato anunciada por
Bartomeu.
El terremoto ya era total y por si fuera poco, desde
Argentina apareció la versión de que ante lo ocurrido y los permanentes
problemas entre los dirigentes y el plantel (el periodista de la Cadena SER de
Barcelona, Sique Rodríguez, afirmó a Infobae que la relación entre ambas partes
“está rota y sólo puede compararse a lo ocurrido en 1988 cuando los jugadores
se rebelaron por el impago de sus sueldos en el llamado Motín de Hesperia”), se
encontraban en España el vicepresidente y el director deportivo de Newell’s Old
Boys, Cristian D’Amico y Sebastián Peratta, para intentar un acercamiento al
crack por si existe la chance de no renovar su contrato, que vence el 30 de
junio de 2021.
Así es que para
apaciguar los ánimos y tranquilizar a los barcelonistas, el diario “Mundo
Deportivo” entrevistó el jueves y en exclusiva a Messi, en el que el crack dice
“amo a Barcelona aunque extraño mucho Rosario” ) y que si el club quiere “no
hay ningún problema” para continuar aunque dijo también que quiere “ganar más Champions
y Ligas en el club” dando a entender que eso de los títulos podría ser
fundamental a futuro (y luego hizo hincapié en que el equipo no está hoy para
ganar la Champions y es una espina clavada que tiene desde hace 5 años), aunque
fue muy duro con varias áreas del club, como cuando dijo sobre Abidal que “me molestó que el secretario
técnico me adjudique un poder que no tengo, es una locura, no podía dejar que
me atacara”, que como equipo “Tenemos que crecer porque con esto no alcanza
para ganar la Champions” y consultado sobre los primeros silbidos en el Camp
Nou por los continuos pases al arquero Marc Ter Stegen, admitió que “que “es
verdad que jugamos mucho para atrás y la gente se pone nerviosa porque nos
pueden quitar la pelota y marcarnos un gol. No estamos jugando bien”.
Todo esto se suma al más directo enfrentamiento que desde hace tiempo
mantiene el subcapitán Piqué con la dirigencia. El defensor ya había dicho en
una zona mixta tras un partido, “no nos hagamos daño a nosotros mismos” y en
Twitter, respondió con la palabra “títere” a un periodista que había defendido
a la actual dirigencia.
Hace pocas semanas, Bartomeu había sostenido que ya estaba negociando la
renovación del contrato de Messi con su padre, Jorge, aunque el jugador salió a
responder que no manejaba ninguna información al respecto, aunque
paralelamente, la Cadena SER de Barcelona informó de una negociación paralela a la del contrato entre el Barcelona y Lionel
Messi Management para colocar productos “Messi-Barca” en tiendas y que eso está
muy avanzado y algunos creen que ese sería un paraguas para la continuidad del
jugador después de 2021.
Si Bartomeu tuvo que acudir a reunirse con el plantel
para aclarar lo de la campaña difamatoria en las redes sociales, semanas atrás
había ocurrido lo mismo pero para tratar de cerrar las heridas causadas por
Abidal, quien en otra entrevista con el diario “Sport” de Barcelona había
sostenido que notaba al equipo desgastado y desanimado y que por su percepción
por haber sido jugador, era mejor cambiar de entrenador, por lo que fue
relevado Ernesto Valverde cuando el Barcelona se encontraba primero en la Liga
Española, aún en la Copa del Rey y en octavos de final de la Champions League
europea. También negó que le ofrecieran ser entrenador a Xavi Hernández en la
reunión que mantuvieron en Qatar junto con el CEO del club, Oscar Grau, aunque
esta semana la Cadena SER difundió la lista de pedidos del ex volante para
hacerse cargo del plantel (contratar a Joan Vilá, su padre futbolístico, para
coordinar el estilo en todas las categorías, a Jordi Cruyff, hoy director
técnico de la selección ecuatoriana, cambiar el departamento médico del
plantel, fichar a su ex compañero Carles Puyol como un enlace con los
jugadores, y que su hermano Oscar Hernández fuera parte del cuerpo
técnico). Xavi quería que lo esperaran a
julio para iniciar una temporada desde cero, pero el presidente azulgrana
quería un cambio ya mismo, y entonces optaron por otro entrenador “con ADN Barꞔa”,
Quique Setién.
Enterado de lo que Abidal declaró en la entrevista,
Messi, que siempre se manifestó a favor de Valverde, optó por responderle desde
Instagram, exigiendo que se den nombres y apellidos de los jugadores
“desanimados”. Desde la dirigencia se pensó al contratar a Abidal, que éste
podía ayudar a controlar un vestuario que les resultaba complicadísimo, pero
resultó un fracaso. Incluso hay quienes sostienen que el ex lateral francés ya
no tiene ningún peso y que sólo falta
oficializar su salida.
Por si todo esto fuera poco, en un club sin un solo
día de tregua, Bartomeu presentó el jueves al delantero danés Martin
Braithwaite, adquirido al Leganés en 18 millones de euros gracias a que el
reglamento de la Liga Española le permite reemplazar a un jugador lesionado, en
este caso Dembélé (ahora es el club madrileño el que pide que le habiliten
contratar a alguien en lugar del delantero perdido, aunque esto generaría en
España un efecto cascada) pero casi toda la atención estaba puesta en el “Barꞔagate”.
“Estamos trabajando internamente y si hay noticias
sobre esto, los convocaremos”, dijo el presidente, que sólo aceptó dos
preguntas en la conferencia de prensa. En un artículo del diario “El País”, el
periodista Ramón Besa se refirió a posibles “filtraciones” en el manejo de las
cuentas digitales porque aparecen informaciones sobre el opositor Font que
parecen haber salido del propio club.
Al otro día, y luego de una tensa reunión de seis
horas de la dirigencia, aunque extra oficial en la que el vicepresidente
primero Jordi Cardoner y el posible candidato oficialista en las elecciones y
vicepresidente institucional desde el 2 de enero pasado, Emili Rousaud,
presionaron a Bartomeu para que abandone el cargo o llame anticipadamente a
elecciones, se comunicó que Jaume Masferrer, mano derecha del presidente, fue
suspendido de sus funciones aunque todo continuará en la Asamblea
Extraordinaria que podría llevarse a cabo el próximo jueves 27 aunque se
pretende que comience cuando haya concluido la investigación del “Barꞔa-Gate”,
a cargo de Price Waterhouse.
La actual
comisión directiva suma problemas. De los 18 miembros iniciales, ya renunciaron
cuatro vicepresidentes, Susana Monje (2016), Carles Vilarrubí (2017), Manel
Arroyo (2018) y Jordi Mestre (2019) y también se decidió aplazar la Asamblea
del llamado “Espai Barꞔa” (un proyecto de reurbanización del Camp Nou de 40.000
metros cuadrados que contempla la construcción de un Palacio Blaugrana, un
auditorio e instalaciones deportivas y que iba a costar 600 millones de euros y
ya está en 850 y que es una de las causas de menores recursos para fichajes en
el plantel). “Si esta operación sale mal –sostuvo el ex dirigente durante los
mandatos de José Lluis Núñez y Joan Laporta, Evarist Murtra, “el Barcelona corre
el riesgo de convertirse en sociedad anónima. Creo que lo mejor será adelantar
las elecciones”.
Durante la
presidencia de Bartomeu, el Barcelona tuvo cuatro directores deportivos, tres
entrenadores y concretó más de setenta fichajes pero nadie entiende que este
plantel sólo tenga 18 disponibles y que, por ejemplo, se busque un delantero
cuando Carles Pérez, y Carles Aleñá, dos jóvenes de las divisiones inferiores,
fueron cedidos en este mercado a la Roma y al Betis, respectivamente.
“La situación del Barcelona roza la tragedia cuando
Cardoner y Rouseaud le pidieron a Bartomeu que se haga a un lado. Esto confirma
la gravedad que vive el club. No es normal que vicepresidentes le pidan al
presidente que dé un paso al costado. Dejaron al Barcelona como si fuera una
entidad pequeña y no “Más que un club”, como se pregona”, indica el
experimentado periodista Paco Aguilar, del diario “Mundo Deportivo”, aunque
matiza que “Falta ver lo que pasa en el ámbito deportivo. Conociendo al
Barcelonismo, todo está pendiente de si la pelota entra o no entra en los partidos claves que vienen. El
escenario no invita al optimismo”.
“La percepción que yo tengo –sostiene David Bernabeu Reverter, de “Deportes
Cuatro” TV- es que no tiene arreglo. No
puede solucionarse en el corto plazo porque es un proyecto vacío, que sólo
puede sostenerse en el tiempo si el título gana algún título pero es muy
difícil porque el equipo suele ser un fiel reflejo de lo que es el club y si el
Barcelona tiene 16 o 17 fichas profesionales es porque hubo una falta de
planificación tremenda, porque las decisiones que se han tomado no tienen ni
pies ni cabeza, porque se ha fichado mal, porque en invierno se han ido cinco
jugadores y no ha venido nadie, algo insólito en la gestión de un club de élite
y esto ha afectado al equipo, que tiene a Messi y eso puede salvar la situación
pero no puede él solo arreglarlo todo, por más que aquí es Dios, cuando un club
está pasando por encima de la gente, de los socios y del sentido común” y cree
que la situación “sólo tiene un futuro: dimisión, un paso a costado y
elecciones”.
Joan Batllori, de la Cadena Cope Barcelona, en cambio, cree que el equipo “ha
demostrado que es capaz de convivir al margen de las situaciones
institucionales convulsas, aunque tampoco está en un buen momento” si bien
sostiene, como sus colegas, que el club “lleva un arranque de año tremendo, de
incendio en incendio que ha generado una sensación de inestabilidad y debilidad
muy grandes. Demasiadas cosas en poco tiempo que afectan a distintas esferas
del club pero al final hay un máximo responsable que es el presidente. Es
necesario que el club esclarezca lo que ha pasado con las redes sociales y las
pocas explicaciones que ha dado el presidente no han sido suficientes ni fue
convincente pero todo esto hay que leerlo en clave electoral. Aunque no parezca
que quiera, Bartomeu debería dar un paso al costado o llamar a elecciones”.
¿Podrá Bartomeu patear la crisis para adelante y salir indemne como en
2015? Sus últimas fichas parecen jugarse
en la próxima semana en dos estadios calientes, el San Paolo de Nápoles, donde
el Barcelona jugará la ida de los octavos de final de la Champions, y el
Santiago Bernabeu, donde le espera el Clásico que puede definir la Liga.