Salvo por la época de la disputa, la única gran
crítica que podría formulársele porque ya la Liga terminó hace tiempo y llega
la Eurocopa en pocos días, la final de mañana de la Copa del Rey, en Madrid,
entre el Barcelona y el Athletic de Bilbao reúne como pocas veces todos los
condimentos para transformarla en una de las más destacadas de los últimos
tiempos.
Los dos equipos son respetados y admirados por el
mundo del fútbol por el buen trato de la pelota, al punto de basarse en el
control y la posesión, con entrenadores que se consideran mutuamente como Josep
Guardiola en el Barcelona y el argentino Marcelo Bielsa en el Athletic, y ambos
llegan con la ambición de terminar la temporada con un título, luego de quedar
eliminados en las fases finales de los torneos europeos (los catalanes en
semifinal de la Champions League y los vascos, en la final de la Europa
League).
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