viernes, 27 de abril de 2007

Riquelme y el elogio de la lentitud

En el gran libro de Johan Cruyff, "Mis futbolistas y yo", el ex gran delantero holandés afirma que el fútbol "es un deporte de vagos" y explica la definición en que si bien es un deporte colectivo que fue modernizándose y cambiando como todos los aspectos de la vida, sigue manteniéndose la idea de que la velocidad óptima para jugarlo es "al trote, no corriendo" y pone como supino ejemplo al brasileño Pelé. "O Rei" fue un atleta, en el sentido de que utilizaba todo su cuerpo para jugar. Saltaba bien, cabeceaba bien, remataba bien de media y larga distancia, definía a la perfección...pero corría muy poco. Y es lógico, porque en un deporte de dominio depelota con los pies, cuanto más velocidad, menos tiempo para pensar. El freno, el ritmo, el cambio de velocidad y de frente, la cabeza levantada y el manejo de los tiempos, son fundamentales porque de lo contrario, como dijo alguien alguna vez, "que me traigan entonces a once Ben Johnson y salgo campeón seguro". Pero el fútbol no es atletismo. No es correr. Porque si no, todo sería muy fácil. Lo que hay que administrar es una pelota.
Cierta vez, hace pocos meses, y en unó de sus enésimos regresos para salvar a Rosario Central cuando ya pretendía jubilarse, el "Viejo" Angel Tulio Zof, que no viste jeans a la moda, ni dice que es amigo de Serrat ni que lo fue de Troilo ni de la negra Sosa, es decir, no es un "progre" que tenga prensa amiga para ofrecerse en el mercado, fue consultado sobre qué les pudo haber dicho a los chicos de veinte a los que dirigió y cambió de mentalidad para sacarlos a flote luego de una severa crisis, y cuando ya ni siquiera podía gritarles desde el banco, dejando ese lugar para su ayudante Cuffaro Russo. "Es simple. Les dije que al fútbol se juega con una pelotita, que no se olvidaran de la pelotita".
Y Juan Román Riquelme, criticado por su lentitud, que a veces para muchos se transforma en apatía, en frialdad o en desgano cuando para otros como nosotros es indiferencia ante tanto pizarrón y maltrato, o desmotivación ante tanto atleta dando vuelta, no se olvida nunca de que esto tan hermoso que es el fútbol, se juega con una pelotita. Que sin ella, no se va a ninguna parte aunque se corra todo el día.
Recuerdo aquellos partidos de Copa Libertadores de Newells, cuando desde la TV nos decían con admiración "lo que corrió Domizzi..." en fin, no sé cuánta gente se acordará hoy de lo que corría Domizzi, pero basta con preguntarle a algún hincha de Boca, o del Villarreal en España, o de la selección argentina, por alguna jugada de Riquelme, por ejemplo, aquel soberbio caño que le metió a Mario Yepes en la Bombonera, o cualquier pase gol a cualquiera de sus compañeros, y no habrá que buscarle más pelos a la leche.
Riquelme, sin embargo, juega lento. O no corre tanto, sino que prefiere saber ubicarse en la cancha y ser punzante con sus pases, con los milimétricos pases que dejan a sus delanteros (hoy en Boca) solos frente al arquero. Anoche fueron siete goles ante el Bolívar por la Copa Libertadores, que no fueron trece o catorce por la gran actuación del arquero paraguayo Sayas (puntuado en algunos diarios con 4 puntos....una muestra de lo que ve este periodismo de la globalización que pone puntajes de acuerdo a los resultados y a los goles que le hacen a un arquero y no por su desempeño total). Y Riquelme tuvo demasiado que ver con esta goleada, aunque, como decimos, para muchos Ledesma (un esforzado jugador, que desde ya que complementa a los habilidosos) tuvo el mismo puntaje que quien por sí solo hace jugar a todos.
Tiempos que corren y valoración que se hace hoy: da lo mismo (o es aún mejor visto) quien corre que quien juega. Es el fútbol-trabajo que se va imponiendo al fútbol-juego. Y Riquelme sigue resistiendo, sin festejar a lo loco los goles de penal, metiendo pases gol, deleitándonos con sus toques de "vago". Riquelme sigue jugando en tiempos de duro trabajo y de fútbol-atleta. Riquelme sigue resistiendo.

jueves, 26 de abril de 2007

Dejad a Maradona vivir en paz

Un periodista que forjó su carrera en la eterna compañía de Diego Maradona (¿cómo no ser un amigo fiel de quien te salva la vida y asegura el pan de tus hijos?), contaba que una vez en Suiza, durante una de las tantas internaciones del diez, ambos salieron a dar una caminata por la zona, sin que nadie se les acercara ni abordara al ex genio de la pelota. El cronista, entonces, le comentó a su interlocutor que era una gran oportunidad, tal vez largamente soñada por el astro, de tener intimidad. Pero en encontró con una respuesta inesperada: "una cuadra más sin que alguien se me acerque, y me muero".
Maradona no es sólo un producto de sí mismo, como un sector cómodamente quiere hacer ver, sino que es un producto de una sociedad enferma, y´hubiera sido, por lo mismo, muy extraño que estuviera sano hoy.
Gianni Miná, hace ya más de una década, me decía en su casa de Monte Mario, en Roma, que la máquina de picar carne humana del sistema en que vivimos, no le pide explicaciones a los corruptos dirigentes que se roban fortunas de cada club de fútbol, con arreglos, transacciones exrañas que siempre, invariablemente, los terminan enriqueciendo. Peroo en cambio sí le pide explicaciones a los pobres tipos que sólo cuentan con habilidad para jugar a determinado deporte, en este caso el más popular del planeta, y que no tienen fomación alguna y además, generan fortunas a partir de su propia producción.
Maradona llegó a Europa, a jugar en el Barcelona, cuando recién despertaba a la vida. No tenía 22 años y ya amasaba una fortuna. Los medios lo persiguieron comoa pocas estrellas del espectáculo, y no estaba preparado para eso. Muy pocos lo están, pero nadie construyó su fama, por lo generado dentro de un campo de juego.
Todos esos medios, esa imagen construida en años por lo que todo lo que dijo tuvo dimensión planetaria (y muchas veces lo que dijo, a su manera, con honestidad brutal, fue razonable y que pocos se animan a decir), fueron construyendo este Maradona actual con tantos problemas, con tantas adicciones, entre las que no se suele contar la de los propios medios, la popularidad que al no poder producir, es decir, jugar por sí mismo, se reduce a la historia, a lo que fue, y a alguna frase rimbombante de lo que sea que lo que le queda de inteligencia se rebuscará en encontrar para seguir vigente. Ya no importa el "cómo" ni el "qué". Lo que importa es estar en los medios de la manera que sea, de no perder vigencia, acostumbrado como lo acostumbraron, a que eso sea así por siempre.
Y ahora, cuando se extiende un falso rumor de que incluso pudo haberse muerto, nos impresionamos al darnos mínima cuenta de lo que puede generar un sistema en un tipo con habilidades para jugar al fútbol, como quizá nadie nunca logró desde que el fútbol es fútbol, pero ahí comienza y termina todo. En lo demás, en todo lo demás, es un simple mortal afectado por uin sistema que también lo usó, como lo hace cuantas veces puede con todos nosotros todos los días de nuestra vida.

lunes, 23 de abril de 2007

La sana venganza del Inter

Siempre cuesta aceptar, por una cuestión de oposición a un sistema incomprensible de innecesarios gastos en este mundo tan injusto de tanta gente sin recursos, y algunos pocos impudorosamente ricos, a estos clubes europeos multimillonarios que llegan a tener carísimos jugadores sentados en el banco de suplentes, como si se tratara de una colección de estrellas para satisfacer egos personales o para no quedar fuera de tono en los mercados. Esta nueva moda de una mayoría de jugadores extranjeros que luego cuando festejan un título apenas si saben canciones que la tribuna festeja en su propia lengua, algo extendido hoy en todo el continente europeo con equipos alemanes llenos de brasileños, o equipos ingleses llenos de franceses. Justamente el Inter, junto al Arsenal (no el de nuestro viaducto, el de los milagros futbolísticos que partieron de quien ocupa y se aferra al sillón de la calle Viamonte, sino al más viejo, de Londres, acentuado en la primera A), fueron los dos primeros equipos en alinear once extranjeros como titulares. Un auténtico despropósito que llevó a que con la ironía que lo caracteriza, Carlos Bianchi me dijera en una entrevista para la FIFA Magazine ante una pregunta sobre el fútbol eurpoeo, "¿cuál es el fútbol europeo? si todos los equipos están llenos de extranjeros? ¿cuál es el club representante verdadero del fútbol de un país, en estos tiempos?" y tiene mucha razón.
El Inter, por muchos años, fue quizá el mayor ejemplo del despropósito institucional europeo en el fútbol, gastando fortunas en jugadores de moda, sumando gente en los distintos puestos, y perdiendo campeonatos de manera clamorosa y en serie. Y Massimo Moratti, el petrolero de izquierdas que puso su fortuna al servicio de su pasión, también tuvo que tragar mucho. Las burlas de sus máximos adversarios, especialmente la Juventus, aunque también el Milan o la Roma, y los títulos que se iban a las costas vecinas. El máximo ridículo acaso fue en la tremporada 2001-02, cuando llegó a la última jornada como líder, luego de 13 temporadas sin ganar un scudetto, y teniendo que enfrentar en el Olímpico de Roma a un Lazio que no quería ganar porque de hacerlo favorecía a la Roma, eterno rival y primer perseguidor del Inter. Pero los nerazurri de Héctor Cúper poco menos que regalaron ese scudetto, dejándose empatar dos veces por el equipo amigo, yéndose al vestuario al entretiempo 2-2 y allí fue que los laziales se enteraron de que ya no había peligro porque la Roma no ganaba, y en el segundo tiempo ganaron 4-2, sirviéndole el scudetto a la Juventus. Peor que ese scucetto ya no podía ser. Ni siquiera salía bien la excursión de cada año por la Champions League, y en una ocasión, una dolorosísima eliminación ante el Milan por un gol de diferencia en zona de definición.
Mi propia ligazón con el Inter está dada por dos circunstancias. La primera, aquél día de la pérdida del scudetto, porque con el colega Rubén Costa, residente en Barcelona, teníamos ya firmado un contrato con una editorial italiana para lanzar al mercado la biografía de Cúper, que luego de la derrota, tuvo que ser bajada la publicidad en internet, y quitada del catálogo por su editor. La segunda fue un día de 2001, cuando fui invitado a un debate televisivo sobre el fútbol como juego, organizado conjuntamente por el canal Stream y la Comuna Baires de Milan. Allí, cuando me tocó hablar, fui duro con lo que pensaba que ocurría en el calcio (luego, hartamente comprobado en el calciópoli, que sé que no gustó a los organizadores, aunque sí al gran técnico Julio Velazco, argentino que luegoi fue director deportivo de la Lazio y héroe del voleibol nacional). Las luces no me dejaban ver las tribunas, y luego, en la comida posterior, pude darme cuenta de que allí estaban entre otros, desde Moratti hasta Javier Zanetti, desde Farinós a otros jugadores interistas, que no sólo nada dijeron sobre mi alocución, sino que me dieron la razón por lo bajo.
Y a este punto quiero llegar: Moratti puede ser acusado de malísimo administrador. De fichar jugadores a la moda. De encariñarse con otros que no son tan buenos como parecen (Recoba es el mejor ejemplo), de no ser duro en el manejo grupal, y hasta de desconocer absolutamente todo sobre fútbol. Pero lo que debe aceptarse es que Moratti siempre fue un tipo limpio, quizá demasiado en este mundo del calcio. Y esa limpieza la estaba pagando cara, porque la Juventus le robó, de manera increíble y por los peores métodos, distintos campeonatos, con arbitrajes arreglados, con jugadores corruptos, y hasta con doping positivo que el checo Zdenek Zeman, se encargó de denunciar cuantas veces pudo.
Pero a diferencia de nuestros países, en Europa la Justicia es lenta pero existe, y la Juventus no pudo lograr evitar su descenso a Serie B. Que acaso debió ser a Serie C, pero ya el hecho de bajar de categoría indica que algo se movió, algunos de sus jugadores fueron a parar a los azul y negros de Moratti, que se quedó con el scudetto anterior en los escritorios, y con este, por paliza total sobre sus adversarios, con casi 20 puntos de distancia y festejando un campeonato cinco fechas antes.
En mi anterior viaje a Italia pude leer en la revista "Calcio 2000" una muy buena carta de lectores de un tifoso juventino, que con envidia reflexionaba sobre que le costaría mirar a los ojos a un interista, porque éste siempre se defenderá siciendo que al menos, su club es limpio. Y a eso hay que llegar. Con fichajes de más, con prepotencia económica, con mal manejo de muchas cosas, Moratti esta vez acertó con la contratación de Roberto Mancini como entrenador, tan resistido por los propios hinchas por su pasado lazial, porque éste le quitó aquel esquema tan defensivo, rocoso, para quitarle presión y lentamente derivarlo a un juego vistoso, simple. Y al final, el limpio terminó imponiéndose en el mismo año en el que la Juventus pagó sus pecados en Serie B. Es la sana venganza de este Inter que al menos no cayó en la corrupción y que nos emite el mensaje de que todo llega, y que siendo limpio también se puede ganar.

viernes, 20 de abril de 2007

Guillermo, Raul, Antonio y la contracorriente

No son jugadores más. Tanto Guillermo Barros Schelotto, como Raúl González Blanco, como Antonio Del Piero, tienen en común haber sido noticia esta semana por un hecho similar, como fondo de sus acciones. Guillermo Barros Schelotto, el Mellizo, el jugador con más títulos en la historia de un club lleno de títulos como Boca Juniors (nada menos que 15), ha decidido, por fin, cambiar de aires para terminar su carrera en el soccer de Estados Unidos (en el Columbus Crew) y de esta forma cerrar un ciclo brillante en un club en el que fue amado y no por casualidad, sino porque primero él dió todo de sí, no sólo jugando bien, sino con amor propio, defendiendo la camiseta al punto tal de rechazar innumerables ofertas del exterior, dándole a Boca la importancia que se merece en el concierto mundial. El Mellizo no parece un jugador de estos tiempos, sino de aquellos otros, que por suerte hemos podido vivir y constatar, de cuando los jugadores amaban la camiseta, y no necesitaban besarla para justificarse, o sacársela para mostrar la de abajo, la que aman de verdad. El hincha argentino no es tonto. Es intuitivo, y sabe bien cuándo los jugadores aman de verdad una camiseta. Y el Mellizo amó a Boca y viceversa. Y no necesitó llorar en la conferencia de prensa cuando anunció su salida del equipo, harto ya de estar harto, como diría el maestro Joan Manuel Serrat, de que le faltaran el respeto una y otra vez.
En España, algo parecido pasa con Raúl, a quien el Real Madrid no le dice nunca si le piensa renovar el contrato luego de todo lo que le dió a los merengues desde que debutara hace ya década y media, y con dos centenares de goles convertidos. Otra falta increíble de respeto de una institución a la deriva, como la de los blancos en los últimos años. Raúl se las bancó todas. Pasó los buenos tiempos de las tres Champions en cinco años, en tiempos de Hierro, Redondo, Seedorf, y luego pasó los años de sequía, los actuales. Hizo lo que pudo y hasta resignó tres años de estar en la tabla de goleadores, para jugar para Ronaldo porque los entrenadores así lo querían. Jamás un problema. Acaso un desliz perdonable del día que en pleno festejo de liga en las Cibeles, pidió que le trajeran "ahora mismo" al alcalde de la ciudad, Jesús Alvarez del Manzano, al notar que la famosa estatua estaba cercada por estar en obra. Pero en tantos años de carrera, eso no es nada. Y el mismo club que manoseó y maltrató a un gran goleador como Fernando Morientes (quien casualmente tiene mañana sábado una chance más de vengarse, como lo hizo con el Mónaco en 2003), ahora lo hace con quien lo dió todo por la camiseta, aún proviniendo del vecino Atlético Madrid. Morientes pudo ser jugador del Barcelona. Iba a ir en una triangulación en el pase de Ronaldo al Real Madrid desde el Inter. Pero justamente fue Raúl, junto con Hierro, quien trabó ese pase, exigiendo al entonces presidente Florentino Pérez, que Morientes se quedara en el club. Porque Morientes siempre quiso quedarse en el Real Madrid.
Y Del Piero también pertenece a esta cofradía de los que aún sienten amor por su camiseta. Tan es así, que siendo campeón mundial con Italia en Alemania 2006, el talentoso bianconero aceptó pasar por la humillación de jugar en Segunda luego de la sanción por la corrupción en el Calciópoli, pero prefirió continuar vistiendo la camiseta de la Juventus. Y ahora segramente tendrá el premio de jugar en Primera del calcio la temporada 2007/08, y acaso luego diga "adiós" y continue en el club como dirigente, tal lo prometido por la familia Agnelli. Es lo menos que podía hacer por un jugador tan identificado con su club, y tan comprometido. También Del Piero ganó muchas cosas con la "vecchia signora", pero más importante aún es haber estado tantos años al máximo nivel.
Nos acordamos en este momento, cómo no, de aquellos tiempos de Ricardo Bochini, de Norberto Alonso, que se tuvo que ir de River y lloró cuando le convirtió aquel gol con la camiseta de Vélez en el Monumental en 1982, de Silvio Marzolini y aquella doble vuelta olímpica enbtre los grifos en 1969 en el mismo Monumental, de la extensa carrera con el 4 del San Lorenzo de la camiseta con el "Casla" a la altura del corazón del "Sapo" Sergio Bismark Villar, y nos preguntamos qué quedó de todo aquello, y cuánto que lo añoramos. ¿Todo tiempo pasado fue mejor? a veces pareciera que sí, pero los Guillermos, Raúles y Antonios, que navegan contracorriente, nos generan un hálito de esperanzas en medio de tanto desierto.

jueves, 19 de abril de 2007

La pulga que los pariò

El fútbol del mundo se emparejó, es cierto. Por eso será que a las semifinales de la Champions League llegaron el Manchester United, el Chelsea, el Liverpool y el Milan. Y también las cosas cambiaron en cuanto a qué tipo de jugadores deben ser seleccionados en los equipos. Ahora, los científicos de esto, los grandes estudiosos, los hombres de laboratorio, los que miran videos todo el día, sostienen que el biotipo cambió y que sin mucha altura, no podés jugar en el terreno hiperprofesionalizado y globalizado. Es más, el arquero tiene que medir dos metros y tener manos grandes, como Dida. O delanteros como Carew, o como Peter Crouch. Los chiquitos, ya no sirven más. Porque sucumben contra los grandotes. Por eso, nos imaginamos, habrá entrado Julio Cruz contra los alemanes en el Mundial. Porque un grandote molestaba más que una pulga que nada podía hacer contra esos dos gigantes. Y eso que lo decidió Pekerman, uno de los supuestos defensores de "nuestra manera de ver el fútbol". También tiene razón Rikjaard, o los dirigentes del Barcelona, cuando dicen que Javier Saviola no puede jugar en ese fútbol, que es demasiado bajo. Y sí, qué le vamos a hacer. Los tiempos cambian y el conejo sólo hace 20 goles por temporada. Mejor traigamos a Guidjhonssen, que si te fijás, ya habla castellano y apenas si llegó. Encima tiene pinta: rubio, islandés, ¿qué más se puede pretender?
Los nostálgicos que hablan del famoso gol de Maradona a los ingleses no se acuerdan de que éstos no le hicieron foul y por eso llegó tan lejos. ¿Qué me vienen con Messi y esos dibujitos que pone en la TV y que nos dicen que nada es imposible? con ese fisicucho, no podés jugar en Europa. Maradona hubo uno solo, pero mirá lo que tiene que soportar el Kun en el Aleti.
Polifuncional es Zabaleta, al que destacó Pancho Ferraro en el Mundial sub-20 como mejor jugador argentino en Holanda, cuando se ganó el quinto título. Y tenía razón Ferraro, cuando decía que Messi tenía que ir al banco porque no aguantaba todo un partido a ese ritmo. O cuando Pekerman, ya contra Paraguay, en las eliminatorias del Mundial de Alemania, en Asuncióin, puso a Zabaleta y no a Messi, porque aunque son de la misma generación, al pibe había que cuidarlo....fijate que siempre hay que cuidar a los habilidosos, no a los polifuncionales. Estos juegan siempre, los otros no sirven, tienen que crecer. Carrizo no sirve, no mide dos metros ni tiene manos grandes, y el Bocha tampoco, porque era taciturno, a veces no tenía las mismas ganas de jugar y encima no gritaba los goles de penal o al lado del arco. Un amargo, viejo.
El fútbol de ahora es para los grandotes, los que tiene mucha masa muscular, los que juegan en varias posiciones. ¿Para qué querés marcadores de punta como el Sapo Villar, el tano Pernía o el chivo Pavoni? no, mejor pongamos a un central de lateral, porque todos tienen que saber hacer todo. ¿El gol de Messi al Getafe? y....los azulones deben tener algo de ingleses, fijate que nadie lo bajó, si no...la pulga esa no llegaba.
No nos jodan más, basta de versos...el fútbol, por suerte, sigue jugándose con los pies.
Ni más, ni menos.

Santa Monica compra Puntogol (nota aparecida en "El Mundo" de Madrid, 19-4-07)

La empresa Santa Mónica adquiere el marketing del fútbol argentino

Por Sergio Levinsky, especial para “El Mundo”

Jesús Samper, el presidente de la empresa Santa Mónica, confirmó a este periódico que ha adquirido los derechos de marketing del fútbol argentino a la empresa Puntogol ST&M, con sede en Islas Vírgenes y de esta manera, comienza a instalarse en Suramérica y queda bien posicionada para una futura posibilidad de quedarse también con los ansiados derechos de televisión del fútbol de este país, en manos de un monopolio que desde 1986 manejan la empresa Torneos y Competencias (TyC) y el Grupo Clarín hasta 2014, pero que es motivo de tensión con los clubes en este momento, y que no casualmente será revisado este año.

Santa Mónica ya controlaba los derechos de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y siete equipos de la primera división en España, y hará lo propio con cinco equipos en Chile, mientras que en la Argentina no descarta el mismo proceder “aunque sólo hemos hecho tanteos con el club Boca Juniors, de momento”, señaló Samper, quien explicó que la idea de la empresa “es ensanchar su base de acción” y que no cambiará la dirección de su sede, en el centro de Buenos Aires, ni tampoco a sus integrantes en este país.

De hecho, la estrechísima relación entre la RFEF y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) ya se vio reflejada en dos hechos en los últimos meses. Desde la designación de Horacio Elizondo como árbitro nada menos que de la final del Mundial de Alemania, con una terna argentina, siendo cuarto y quinto árbitros dos españoles en la comisión que manejaba Angel María Villar, y en el partido amistoso jugado por los dos seleccionados el pasado 11 de octubre en la inauguración del estadio la Nueva Condomina, del Murcia, club que también maneja Samper, y en el que Maxi Rodríguez se rompió el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda, en tanto que oficialmente, el estadio recién se inauguró un mes después ante el Valladolid porque según sus dirigentes, se buscaba un rival de importancia en Segunda para la ocasión.


Puntogol

La empresa Puntogol existe en la Argentina desde el 23 de enero de 1998 y su presidente es Eduardo Martino, luego de que se alejara el entonces presidente del Banco Central, Martín Redrado, mientras que también se atribuyó como accionista a Alejandro Barrionuevo, hijo del dirigente sindical Luis Barrionuevo, conocido en la Argentina por su antigua amistad con el ex presidente Carlos Menem y por ser el autor de la frase por la que recomendaba “dejar de robar por dos años” para mejorar a la Argentina. Con los años, y luego de ser senador nacional, Barrionuevo se acercó al deporte para ser presidente de Chacarita Juniors y mantener un estrecho vínculo con su barra brava, una de las más violentas, pese a lo cual, dejó el club para pasar a ser dirigente de Independiente, club en el que también fue presidente el actual mandatario de la AFA, Grondona.

Justamente y aunque tampoco aparece como accionista de “Puntogol”, crecientes rumores colocan a uno de los hijos de Grondona, Julio Ricardo, actual presidente de Arsenal y posible heredero del máximo trono de AFA, como parte, así como al mismo actual presidente de Independiente, Julio Comparada, socio de Martino, el que sí figura, en la exportación de prendas de vestir de alta costura.

Según la presentación de Puntogol en la Inspección General de Justicia argentina, sus accionistas son Puntogol Corp, con sede en 20 de Castro Street, Road Town, Tortola, Islas Vírgenes británicas, y Futdial S.A., con sede en la calle Juan Domingo Perón 830, en la localidad de Villa Constitución, en la provincia de Santa Fe.

El representante de Futdial es Rogelio Riganti, ex proveedor de materiales del negocio particular de Julio Grondona y que según Samper, continuará en la empresa.

En su presentación oficial ante el Estado argentino, Puntogol destacó el aumento de auspiciantes para la selección argentina, desde compañías de telefonía móvil hasta bancos, y el desarrollo de licencias como la electrónica, indumentaria, termos, bufandas y hasta implementos escolares, en tanto indican que contribuyeron a aumentar el presupuesto de la AFA en un 17 por ciento en 2005.

Lo que nadie ha explicado hasta ahora es la necesidad de que una empresa ad hoc manejara los ingresos de la selección argentina cuando bien su federación, la AFA, lo venía realizando hasta ese momento.

Renova y los partidos amistosos


Santa Monica también se quedará con la promoción de eventos deportivos y el marketing de los partidos amistosos de la selección argentina, cuya organización está a cargo de la empresa rusa Renova, y cuyo contrato completo jamás fue dado a conocer a la prensa, inclusive en su propio lanzamiento en Buenos Aires, y que según distintas versiones (negadas por Samper, quien dice que sí vio el contrato), habría una exigencia de una lista de jugadores que obligatoriamente deben ser convocados para cada partido del equipo albiceleste, y otras prerrogativas, como que miembros de la empresa puedan pernoctar en el mismo hotel y hasta en la misma planta que los jugadores o el cuerpo técnico.

Puntogol afirma haber aumentado sus ventas en un 27 por ciento con respecto a 2006 y el último balance presentado, el 30 de junio de 2006, informaba de una ganancia neta de 18.495.322,12 pesos argentinos, unos 4,5 millones de euros, sólo en patrocinios de la selección argentina.

La relación con ISL

Un hecho llamativo, además de la cercanía de las dos federaciones, aliadas políticamente en el mundo del fútbol, es que tanto Santa Monica en España como Puntogol en Argentina, terminaron cada una por sus medios absorbiendo a las sucursales de la ISL, empresa que quebró en 2001 y que generó uno de los mayores escándalos financieros de la historia del fútbol.

De hecho, quien fuera director comercial de Puntogol S.A., Diego Socaires, fue también director de ISL Argentina, subsidiaria de ISL Internacional y no es casual que Puntogol justamente se presentó oficialmente en ese mismo 2001 durante el Mundial sub-20 realizado en Argentina.

Tampoco es casual que Santa Monica Sports S.L. anunciara en ese mismo 2001 la fusión con ISL S.L. el 30 de junio de 2001, casi al mismo tiempo que lo hacía Puntogol del otro lado del Océano Atlántico, aunque en España, ISL se transformaba en “sociedad absorbente”, como “sociedad unipersonal que adopta la denominación de Santa Monica Sports SL” de acuerdo al artículo 418 del reglamento del Registro Mercantil. De esta forma, todo quedaba con Santa Monica como “continuadora de las empresas Expublisa e ISL Fútbol España”, con la presidencia de Samper y la vicepresidencia de Romeo Cotorruelo Menta.

El extraño vínculo con San Lorenzo de Almagro

Cotorruelo Menta ya es conocido en la Argentina por aquellos años de la quiebra de ISL al hacerse cargo de la empresa Inmark en 2002, que había propuesto, ante los contínuos hechos de violencia en el fútbol, el llamado SISEF (Sistema Integrado de Seguridad para Estadios de Futbol) y que fue presentado por el entonces presidente de San Lorenzo de Almagro, Fernando Miele, el 27 de febrero de 1998, apremiado como estaba por el asesinato reciente del hincha de Huracán (rival barrial de San Lorenzo), Ulises Fernández, el 19 de diciembre de 1997.

Qué papel concreto jugó Cotorruelo Menta con Inmark en la contratación posterior del SISEF para estadios con capacidad mayor de 25.000 espectadores es algo que la Justicia argentina se encargó de investigar bajo la carátula de “administración fraudulenta” por la suma de 1.800.000 pesos de aquellos tiempos, equivalente casi a la misma cantidad de euros, a cargo del juez Juan José Mahdjoubián.

San Lorenzo apareció por esos años como el más entusiasta del sistema propuesto por Cotorruelo Menta, seguido por Boca Juniors, pero para sorpresa de las partes, aparecieron Vélez Sársfield, Independiente y River Plate, mostrando que había un sistema más barato en un millón de pesos, más de la mitad del coste total.

Sin embargo, ante este movimiento inesperado, la AFA se propuso como garante de créditos para montar el sistema de seguridad en los estadios sólo en el caso de que los clubes tomaran la propuesta española.

Por ese mismo tiempo, San Lorenzo estuvo a punto de ser manejado por ISL, pero el movimiento de sus socios y simpatizantes, que organizaron marchas por la misma ciudad de Buenos Aires, terminó con el intento. Ahora mismo, Samper afirmó que en este tiempo mantuvo conversaciones con Mauricio Macri, presidente de Boca, y el otro club que se había mostrado receptivo a la oferta española en 2002.

Pero el vínculo con San Lorenzo no terminó allí sino sólo estaba comenzando. Miele, sindicado como uno de los delfines de Grondona, y que luego terminó expulsado del club, y que en aquel tiempo tenía como filial al club Almagro (hoy en Segunda), cedió, en un convenio con el Murcia, a jugadores como Maciel, Tonelotto, Meloño, Acciari y Figueroa y hasta un hombre del club argentino, como el ex delantero Alberto Mario Husillos, terminó en el Murcia como director deportivo hasta hace escasos meses.

Las casualidades hicieron que San Lorenzo apenas si pagara las primeras cuotas de 1.800.000 dólares que costó colocar el SISEF y Boca consiguió una importante rebaja en esas cifras.

Inmark Argentina

Volviendo a Inmark, Cotorruelo Menta figura como titular de la subsidiaria argentina, con oficinas en la avenida Diagonal Sur, en el centro porteño. A comienzos de 2005, esta empresa se fusionó con “Make a Team”, creada por Jorge Valdano, quien pasó a ser vicepresidente de la nueva entidad.

En cuanto a los derechos de televisión, que se considera uno de los pasos siguientes que atacará en la Argentina Santa Mónica, es el gran bocado del fútbol, debido a que se conserva bajo siete llaves el mejor secreto que el monopolio guarda bajo siete llaves: cuántos abonados en concreto hay hoy, y que pagan para tener televisión por cable. Se calcula que por año, se recauda sólo del fútbol unos tres mil millones de dólares, de los cuales a los clubes, hasta hoy, van sólo cincuenta….

Esto generó en 2006 un movimiento poco habitual de los clubes, que fueron adquiriendo compromisos políticos con la AFA debido a sus deudas, y que comenzaron a reclamar un aumento en sus ingresos, a sabiendas de que el contrato firmado con las empresas de TV (Torneos y Competencias y el diario Clarín), firmado hasta el 2014, prevé una revisión en 2007.

En ese lapso, y ante la negativa de los dueños de los derechos, Grondona anunció una nueva oferta de Telefónica de Argentina por 2500 millones de dólares por un contrato de diez años y otra de Santa Mónica, que ofrece 100 millones anuales, justo la misma cifra que la AFA casualmente comenzó a reclamar al monopolio mediático.

Según las informaciones de que dispone “El Mundo”, la operación entre Santa Mónica y Puntogol involucra un coste total de 20 millones de euros, y tanto la AFA como Puntogol mantienen absoluto silencio sobre el tema.



Samper: “Nuestra idea es ensanchar los dominios en Suramérica”

Por S.L., especial para “El Mundo”


- Puede decirse que la operación de la adquisición de los derechos de marketing del fútbol argentino ya fue concretada?
- Oficialmente no se anunció, pero podemos decir desde Santa Mónica que es una operación cerrada y que permitirá que nuestra empresa se ensanche en un continente que nos interesa mucho, el suramericano.

- Se han quedado con los derechos de marketing de cinco clubes chilenos. ¿Piensan hacer lo mismo con los argentinos?, ¿hay algún club en la mira?
- A futuro, tenemos eso en vista aunque de momento sólo hemos entablado un diálogo con la gente de Boca Juniors, pero sigue su curso.

- Es de imaginar que para llegar a semejante acuerdo, habrán tenido trato directo con el presidente de la AFA, Julio Grondona.
- Sólo en lo que cabe, un hecho protocolar, si se quiere, pero nada más.

- ¿Grondona tiene que ver con Puntogol? Porque según distintos rumores, quienes están a cargo de la empresa, de manera real, son amigos o familiares. Incluso los que figuran, también tienen relación particular con él….
- Que nosotros sepamos, no….

- ¿Ha tenido usted acceso al contrato de derechos de organización de los partidos de la selección argentina por parte de la empresa rusa Renova?

- Sí, desde ya que lo hemos analizado. Creemos que es un gran acierto el de haber firmado ese contrato porque representa un suculento ingreso económico para la AFA.

- Pero se dijo que existen muchas irregularidades en ese contrato y que la AFA bien pudo organizar esos partidos, cobrando ese dinero, sin necesidad de Renova, y además, hay cláusulas extrañas, como que por ejemplo gente de esa empresa pueda alojarse en el mismo hotel que la plantilla o que hay una lista de jugadores de los que una cantidad deben ser siempre convocados por el entrenador….
- Eso no es cierto, se lo aseguro.

- Lo que sucede es que ese contrato jamás fue visto por la prensa…
- Desconozco el motivo, pero me imagino que es para no mostrar el accionar a la competencia.

- ¿La sede seguirá siendo la misma?
- Así es. No cambiaremos nada. Todo seguirá igual, y la gente que compone la empresa seguirá siendo la misma.

martes, 17 de abril de 2007

Cuestiones de Seleccionado

Aclaración inicial: desde que comencé a trabajar en periodismo, hace ya casi 25 años, siendo muy joven (porque aún lo soy, no bromeo), algunos retorcidos me insistían en la diferencia entre "seleccionado" y "selección". Me decían, con cierta razón, que "selección" es el conjunto de jugadores que son los que quedan en una lista definitiva para una competencia, y todo el ciclo de pruebas hasta llegar a esta lista final se juega con un "seleccionado", es decir, jugadores que son probados en distintos esquemas y funciones, hasta que el director técnico determina cuáles compondrán la "selección". Y entonces, en vistas del partido (o como le querramos llamar) ante Chile de este miércoles en Mendoza, se me ocurre pensar que pocas veces "esto" que tiene a cargo Alfredo Basile (¿se sorprendieron? se llama así, Alfio es su sobrenombre familiar y Coco, el que le quedó col el paso de los años), se pareció más a un mero "seleccionado" que a la "selección" argentina.
Hace cuarenta años, Dante Panzeri, aquel notable periodista, sociólogo sin serlo, y hombre de derechas, aunque ético, que ahora reivindica con tanta fuerza el falso progresismo periodístico argentino, solía decir que el Estudiantes campeón entre 1967 y 1970 era "De Zubeldía, no de La Plata". No estoy queriendo decir que este seleccionado, que alguna vez pretenderá ser "selección", acaso en la próxima Copa América de Venezuela, en junio, sea sólo de Basile. Pero en cambio, es claro que pese a la buena intención del entrenador por conformar un equipo con jugadores del fútbol local, que de todos modos se terminarán yendo al exterior, en su mayoría, y en poco tiempo, esto no parece ser posible en ete mundo de intereses. Las lesiones de Verón y de Ustari, incluso cómo quedó Daniel Díaz luego del superclásico, y la urgencia por convocar a Cabral y a Orión, muestran que la desorientación institucional del fútbol argentino es muy grande, mucho más de lo que debiera ser.
Estoy diciendo que el seleccionado que se encuentra en el primer puesto de la escala mundial de FIFA (habrá que ver cómo se hace ese misterioso cálculo), convoca a su segundo arquero ante un partido internacional (por más flojo que sea) a un día del mismo. Para pocos esto es una sorpresa, desde ya. Pero para los que estamos "adentro", es decir, que podemos tener acceso a la cocina de los hechos, estoy resulta muy cansador, y sin interlicutores válidos.
Tuve la posibilidad de hablar por horas con Julio Grondona en París en febrero pasado en ocasión del también bastante improvisado Francia-Argentina, que nuestro seleccionado ganara 1-0 con gol de Javier Saviola, y queda claro que no hay nada claro. No sé si me explico.
Grondona desmiente terminantemente que haya, por ejemplo, una lista de una cantidad de jugadores de los que Basile debe convocar un porcentaje determinado, y hasta algún medio español con cierta credibilidad, una vez finalizado el Mundial pasado, afirmó que en el contrato entre la AFA y Renova (presentado a toda pompa en el Hilton de Puerto Madero), permite que los empresarios rusos puedan alojarse no sólo en el mismo hotel sino en el mismo piso que el equipo argentino, y hasta que el dueño de la empresa, puede, si quiere, presenciar la charla técnica y hasta sentarse en el banco de suplentes. Algo a lo que nunca habíamos llegado. Lo que este periodista se limitó a decirle a un Grondona tan sereno que sorprendió a todos, es que es demasiado fácil comprobar si esta versión es falsa: basta mostrar el contrato. Con una copia, alcanza. Pero no. El contrato no se mostró a la prensa ni siquiera en su presentación. Y entonces, da lugar a que uno (malpensado por naturaleza) siga pensando mal, o muy mal, podría decir.
Irregularidades hay muchas, como por ejemplo, preguntarnos para qué se creó la empresa "Puntogol S.A.", ad hoc a la AFA, si con la AFA basta y sobra para organizar partidos de cualquier equipo argentino. En Puerto Madero, los dirigentes de la AFA exhibieron orgullosos un cheque por 16 millones de dólares ya recibidos como adelanto por cerca de 20 partidos amistosos del seleccionado argentino para los próximos cuatro años, hasta el Mundial 2010 (Sudáfrica). Todos contentos. Sin embargo, si prorrateáramos ese valor en veinte partidos....la AFA estaría recibiendo menos dinero del que cobrara en giras anteriores a la existencia de Puntogol.
El mejor ejemplo de lo que cuento lo dió lo ocurrido con un colega francés, de novio con una argentina, y redactor de "Le Parissien", que nos preguntó, en el lobby del hotel del seleccionado, tanto a mí como al colega y amigo Fernando Segura, si era posible acercarse a Grondona y preguntarle de estos temas. Ante nuestra mirada incrédula, vimos que se animó y se le acercó. Se le presentò, con Grondona de frente a nosotros, que nos dedicamos a observar su semblante, siempre denotando serenidad. La charla entre el francés y Don Julio duró unos minutos, hasta que el galo se nos sumó al regreso. Nos contó que ante las preguntas que le formuló a un Grondona impertérrito, il capo di tutti cappi atinó a responderle: "lo que usted me pregunta, en la Argentina jamás nadie lo suele hacer". Toda una declaración y una perfecta descripción de lo que ocurre con nuestra prensa, cuyos enviados especiales se dedican a sacarle algún chiste "al Coco" para congraciarse con él y sonsacarle la formación para mañana. Eso es lo que importa: si juega Saviola o si juega Tévez. Demasiado poco como para que podamos pensar en una selección en serio. El propio Basile dice que es un seleccionador, que por ahora no es un director técnico. Y hasta institucionalmente, tenemos más un seleccionado que una selección. Antes, Marcelo Bielsa no daba entrevistas individuales, pero daba conferencias de prensa en las que igualaba a los medios de todo el país. Ahora, Basile decide con quién tiene ganas de hablar, y ni siquiera acepta listas de espera. Nunca tan seleccionado. Nunca menos selección.
Ni más ni menos.........................

lunes, 16 de abril de 2007

Algunas postales superclasicas

Pasó otro Superclásico. Por suerte, más divertido que muchos anteriores (y eso que la expectativa es tan baja, que nos vamos conformando cada día con menos). Hay que reconocer que el ritmo fue agradable, con permanentes situaciones de gol , y con todos los aditamentos para que el corazón nos bombee más rápido.
Pude leer muchos de los comentarios periodísticos, tratando, claro, de eludir las frases hechas habituales y los conceptos que por contagio, a veces, nos brindan casi al unísono. Y entonces sentí la necesidad de aclarar algunos puntos (no los voy a aburrir con otro comentario a la usanza de los normales).
El puntaje de 10 a Juan Pablo Carrizo, arquero de River Plate, me pareció excesivo, aunque a tono con estos tiempos de escasa exigencia a los "players" (léxico basileano). Carrizo atajó muy bien, tapó varios tiros y fue acaso la figura del partido, pero lo que hay que aclarar es que hoy la mayoría de los delanteros (y Palacio es uno recurrente) patean al bulto, al cuerpo de los arqueros, y entonces basta con estar bien parados (algo que tampoco ocurre con frecuencia, pese a ser elemental en el fútbol) para poder devolver remates que debieran ser gol a la fuerza. Carrizo, reitero, no tiene la culpa de los remates sin dirección de los rivales.
Rodrigo Palacio sigue sin jugar bien un solo partido decisivo. Tiene muchísimas condiciones técnicas, especialmente por ambas puntas, ya no tanto por el centro del ataque. Se descataca por su velocidad, y su llegada al fondo, pero no es un goleador. Palacio viene haciendo goles a la fuerza porque de cien llegadas, unos veinte goles va a meter, pero no es un goleador en el sentido de aprovechar las ocasiones y ser contundente. Lleva demasiados goles perdidos por lo mismo: no saber rematar, y el arco se le suele cerrar demasiado. Contra River, tal vez contrariado por las ocasiones perdidas en el primer tiempo, en el segundo no sólo no tocó la pelota, sino que se escondió detrás de Tuzzio primero, y luego ya se colocó en el centro del ataque, donde comprobadamente no rinde, y no se acercó jamás a la pelota, no se mostró, no la pidió, y generó que River saliera jugando desde allí. Si se recuerda partidos de Palacio como aquel del Mundial cuando no paró de resbalarse, o su desaparición en la final pasada ante Estudiantes en Vélez, creo que es un jugador que debe replantearse la conducta en estos partidos y su entrenador debe estar atento a esta circunstancia.
Y llegamos a Miguel Russo y un Boca que parece que le queda grande, o la mochila le queda pesada de cargar. Bastaría con preguntarse simplemente si Carlos Bianchi o Juan Carlos Lorenzo hubieran perdido de ganar un clásico así, ganando por 1-0 a los 40 segundos, de local, ante un rival que venía animicamente muy mal. La respuesta es tan obvia que no merece demasiado tiempo. Si tratamos de analizar su proceder, veremos lo que tardó en realizar los cambios, en especial el de Guillermo Barros Schelotto por el ya mencionado y desaparecido Palacio. El Mellizo es tan temido por todo River, que aún entrando a los 39 minutos del segundo tiempo (casi una falta de respeto), la tribuna de River parecía una postal, como si le hubieran metido otro gol. Es de imaginarse al Mellizo habiendo entrado veinte minutos antes.
Russo tampoco parecer ver algo elemental, que Boca tiene dos actitudes en todos los partidos, y que o bien hay un factor anímico por el que cae en una peligrosa meseta (remember Liniers ante Vélez en el segundo tiempo), o bien se trata de un hecho físico, pero que ocurre, no hay dudas. Y no ha generado, con el mejor plantel del fútbol argentino, por lejos, una mística de campeón. Basta con el ejemplo de Bruno Marioni, jugador que llega a Boca al punto máximo de su larga carrera internacional, y Russo lo hace debutar frente a River, nada menos, en el verano, y a escasos minutos de terminar y cuando se perdía por dos goles. ¿No era una forma de quemarlo?, ¿qué sentido tenía hacer debutar a una estrella con casi todo perdido? lo cierto es que la suma de todos esos pequeños detalles hacen que se vayan perdiendo los objetivos, con peligro de quedarse fuera de la Copa Libertadores, y de quedarse sin nada también en el campeonato.
Otro jugador para analizar es Fernando Belluschi. Quienes lo comparan con J.J. López cometen el sacrilegio de establecer puntos de comparación entre dos épocas que para mí no tiene nada que ver. Todos lo que tuvimos la suerte de ver fútbol argentino en los setenta, por una cuestión generacional (qué viejo me siento...), sabemos a lo que voy....cualquier jugador de aquellos tiempos, hoy sería poco menos que Gardel entre estos "trabajadores incansables de la pelota" (algunos de ellos, incluso sin ella, sólo por correr). Pero en este fútbol de hoy, Belluschi sea acaso el mejor, el más completo, aunque no está en su nivel. Lo que Belluschi no tiene, en la zona de gestación, son compañeros que dialoguen en la misma lengua.
Muchos en River se descargan contra Daniel Passarella cuando el problema, y recién ahora aparece, viene de mucho más arriba, precisamente de su cabeza. Si River vendió jugadores por 400 millones de dólares y tiene deudas, es que hay muchas cosas que no cierran. A Passarella podría endilgársele mucho más su posible complicidad en los negocios del club que en la formación de un equipo que tiene algunas importantes figuras (Rubén, Rosales, Farías, Falcao, Carrizo, Villagra, Ponzio), con otros que inexplicablemente usan con frecuencia su camiseta (Gerlo, Ahumada, Nasutti). Demasiado irregular como para pretender ganar algo importante, y ojo que van ya tres años completos sin ningún título.
Ni más ni menos que eso........................

SergioL