Desde Estocolmo
Aún con su rostro serio, y siempre a mucha prisa
acaso para recuperar su privacidad, Lionel Messi atravesó una muy buena semana
en la que no sólo renovó su contrato con el Barcelona hasta 2018 sino que se va
consolidando en un seleccionado argentino que por fin, luego de muchos años,
parece ir encontrando la paz largamente buscada, tras una buena victoria 2-3
ante Suecia.
Se había promocionado mucho el enfrentamiento
amistoso entre los seleccionados de Suecia y Argentina, basado en el morbo que
podía producir que volvieran a verse las caras Messi y la estrella local Zlatan
Ibrahimovic, jugador del Paris Saint Germain (PSG), luego de algunas polémicas
declaraciones de éste tras su paso no tan exitoso por el Barcelona, acentuadas
por un libro autobiográfico en el que no deja del todo bien parados ni a Josep
Guardiola, su ex entrenador, ni al propio supercrack albiceleste.
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