Dos semanas atrás hubiera sido calificado como una locura pensar que el presidente de entonces, Ramón Calderón, hoy ya no estuviera en su cargo y sin embargo así lo fue, a partir de una durísima investigación del diario deportivo “Marca”, que demostró que la asamblea del pasado 7 de diciembre que ratificó las cuentas de la entidad, y casi con los votos justos, fue fraudulenta debido a que sufragaron muchos que no estaban habilitados y lo peor, que todo eso fue organizado por amigos del propio Calderón.
Desde ya hacía varios meses que se sostenía cerca del club blanco que Calderón estaba rodeado por un grupo de jóvenes que le realizaban el “trabajo sucio” para despejarlo de cualquier inconveniente como presidente, en especial, por un empleado de la entidad, Mariano Rodríguez de Barutell, más conocido como “Nanín”, de tan sólo 23 años, y quien también regenteaba la famosa discoteca “Pachá”.
Calderón, ya contra las cuerdas por la investigación creciente de “Marca”, apenas si concedió que conocía de lejos a Nanín por ser éste hijo de un amigo suyo, pero luego se comprobó que el joven había organizado la votación de la asamblea del 7 de diciembre y muchos de sus contactos fueron conseguidos a través de Facebook (ahora que ya se marchó de su cargo, Calderón no tuvo problemas en mostrarse en “Pachá” con su amiguito).
Los hechos se precipitaron, y en pocos días ya Calderón, con la voz quebrada, renunciaba y dejaba como sucesor al empresario naviero Vicente Boluda, quien en la primera conferencia de prensa como presidente del Real Madrid, anunció elecciones para mediados de 2009, tal vez incluso antes de que finalice la actual temporada.
Estos hechos institucionales tan graves ya están afectando, y van a afectar mucho más, al equipo de fútbol. Ya sin la Copa del Rey, eliminado por el Real Irún de Tercera división, y prácticamente despedido del título de liga, por tener tan lejos al líder Barcelona (en puntos pero muchísimo más en juego), los objetivos se centran en no perder la segunda plaza para clasificarse directamente a la próxima Champions League 2009-2010, y en tratar de pasar la dura eliminatoria de octavos de final, en febrero, ante el “spanish” Liverpool de Rafa Benítez, que define en su estadio de Anfield.
A su vez, el Real Madrid, al jugarse todo por el todo en una difícil competición como es la Champions League, que no gana desde 2002, apunta todos sus recursos a solucionar otro frente de tormenta que ha tenido en los últimos tiempos Calderón, en una de las tantas crisis que atravesó hasta renunciar. Nada menos que haber intentado inscribir a sus dos nuevos fichajes, el holandés Huntelaar y el francés Lass Diarrá, para la próxima fase, cuando al haber jugado ambos en competiciones europeas durante eta temporada, la UEFA sólo habilita a uno de ellos para cambiar de club.
Este error, que en cualquier club serio cuesta el cargo del director deportivo, en este caso Pedja Mijatovic, en el Real Madrid todo continuó como estaba (¿Mijatovic no debió irse, incluso, cuando renunció Calderón?) y ahora el nuevo presidente, Boluda, se la ha jugado contratando al abogado deportivo más prestigioso, Jean Louis Dupont, quien no es otro que quien llevó el Caso Bosman, que cambió las reglas del fútbol mundial. Por otra parte, también Boluda viajó a Nyon para tratar de desplegar toda la artillería diplomática ante el presidente de la UEFA, Michel Platini, quien ya anticipó en un principio un fallo negativo a las pretensiones del Real Madrid de contar en octavos con ambos jugadores.
Pero más allá de si podrán jugar tanto Huntelaar y Lass ante el Liverpool, con la perspectiva de elecciones a corto plazo, se abre en el Real Madrid un abanico de infinitas posibilidades y escenarios a futuro. La primera pregunta es para el plantel actual y su propio entrenador, el recién llegado Juande Ramos, que no acostumbra a firmar contratos largos, y que ahora se ve forzado a que el candidato a presidente que gane, guste de su estilo y lo mantenga, cosa harto difícil.
Tampoco los jugadores saben qué reglas de juego habrá, si efectivamente a lo máximo en junio puede haber un cambio de presidente, de director deportivo, y de entrenador con un gran porcentaje de seguridad.
Mientras tanto, las versiones que corren son de lo más variadas aunque la que parece tomar más cuerpo es la del regreso de Florentino Pérez y aquellos años de “galácticos” (Figo, Zidane, Ronaldo, Beckham) y glamour, ahora tal vez con Kaká, Cristiano Ronaldo y hasta alguno aventura la chance de pagarle al Barcelona los 150 millones de euros de la cláusula de rescisión de Messi, lo que parece muy complicado.
Pocas veces se ha hablado tanto de un candidato, como en este caso de Florentino Pérez, sin que el propio personaje haya siquiera conversado una sola vez con un periodista en este último tiempo, pero las encuestas lo dan claramente como ganador si se presentara a elecciones, con el 78 por ciento de la intención de voto.
Otro candidato posible es el ex presidente de Telefónica de España, Juan Villalonga, ex compañero de escuela y muy cercano al ex presidente español José María Aznar (1996-2004), quien ya hizo intentos por entrar en la sociedad del Valencia, y que muchos interpretan como un intento del ex mandatario por retornar al poder que da el Real Madrid, máxime que ya su yerno, Alejandro Agag, participa como accionista en el club inglés de la First Division, Queens Park Rangers, donde está asociado al constructor de Fórmula Uno, Favio Briatore.
En cambio, el gran piloto de rallies y ex candidato a presidente del Real Madrid, Carlos Sainz, esta vez parece haber decidido no participar de la contienda, mientras que otro ex candidato que había hecho una buena elección en 2006, Juan Palacio (que llevaba como director deportivo a José Antonio Camacho) también medita presentarse.
Mientras todo esto pasa en el interior del club, la semana finaliza con la noticia de que el defenestrado Calderón fue designado a cargo de los festejos del Centenario de la Federación Española por parte de su presidente, Angel María Villar (que en su momento hizo lo mismo con Juan Gaspart, cuando en plena crisis renunció como presidente del Barcelona e inmediatamente pasó a la Federación Española).
Por su parte, el diario “Marca” y otros medios que se le han sumado a la investigación sobre el Real Madrid, van ahora a la caza de los “calderonistas” que quedan, mientras otros, con ironía, ya se atreven a llamar al club blanco como “Realín Madridín”, en homenaje al joven Nanín que ahora se distrae en las discotecas junto a Calderón.
Alguien preguntó desde una columna cómo gente tan joven puede llegar a generar tanta crisis en un club tan grande, pero no tardó en llegar la respuesta: si otro joven pudo armar un descalabro en el Pentágono, ¿Por qué no en el Real Madrid?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario