martes, 12 de enero de 2016

Messi y una sana costumbre: Balón de Oro por quinta vez (Jornada)




La única duda, en un extraño Kongreshauss de Zurich, habitual palecete en el que se lleva a cabo la entrega del Balón de Oro FIFA World Player que consagra al mejor jugador del mundo del año, llegó cuando se anunció que el que daría el premio sería el brasileño Ricardo Kaká, porque por un instante pudo haberse cruzado por la cabeza de muchos que el beneficiario podría ser su compatriota Neymar.

Sin embargo, la “normalidad” se hizo presente en la gala que organizan conjuntamente la FIFA y la tradicional revista “France Football” y un Lionel Messi que llegó acompañado de su familia y vestido con un lujoso traje de Armani que cambió de los anteriores con Dolce & Gabanna, subió al escenario a recibir su quinto Balón de Oro que lo oficializa como0 el mejor jugador del mundo, una vez más.

Messi, al que sólo osan discutirlo aún unos cuantos compatriotas, y quien sólo una vez recibió en su país el Olimpia de Oro, premio al mejor deportista argentino del año, se convierte definitivamente en leyenda del fútbol mundial. Con cinco Balones de Oro, supera a su máximo competidor del presente, el portugués Cristiano Ronaldo, que le había arrebatado los últimos dos, así como a monstruos del fútbol de otro tiempo como los holandeses Marco Van Basten y Johan Cruyff y el francés Michel Platini, todos ahora relegados a tres conquistas.

El argentino, ganador de 27 títulos en impresionante carrera en el Fútbol Club Barcelona, cuatro de ellos por Champions League y tres de Mundiales de Clubes, no es tan hábil con el micrófono y apenas dijo al ganar el trofeo que “es algo que sueño desde chico” y hasta se refirió a Cristiano Ronaldo, al decir que en las dos últimas temporadas “tuve que ver cómo él se llevaba el Balón de Oro”, mientras que hizo hincapié en su crecimiento “como jugador y persona” a partir de “triunfos y derrotas”.

Antes de anunciarse el ganador del Balón de Oro, ya había certezas sobre el ganador, al punto que Cristiano Ronaldo lucía sonriente y muy poco nervioso, como sabiendo que este año no le tocaría, por los cinco títulos ganados por Messi con el Barcelona y la llegada a la final de la Copa América de Chile con la selección argentina.

Messi también era candidato a ganar el premio “Ferenc Puskas” al mejor gol del año, el soberbio tanto al Athletic de Bilbao en la Supercopa de España, por el que gambeteó a cinco jugadores vascos desde un lateral hasta colocar la pelota en el palo izquierdo del arquero, pero insólitamente se vio superado por un lindo tanto de chilena del brasileño Wendell Lira, que estuvo desempleado y trabajó en una cafetería, en el partido Goianesa-Atlético de Goiás.

De todos modos, la jornada fue espectacular para el argentino, una vez más, al participar también en el once ideal del año, junto al arquero Manuel Neuer (Alemania), los defensores Daniel Alves (Brasil), Sergio Ramos (España),  Thiago Silva (Brasil) y Marcelo (Brasil), los volantes Paul Pogba (Francia), Luka Modric (Croacia) y Andrés Iniesta (España) y los delanteros Cristiano Ronaldo (Portugal) y Neymar (Brasil).

Otro de los ganadores de la jornada fue, como era de esperar, el campeón mundial de clubes, el Barcelona, porque su entrenador Luis Enrique (ausente en la gala), en una medida polémica, fue designado como mejor entrenador del mundo del año porque pese a los títulos, facilitados por una legión de los mejores cracks, superó en la votación a los magníficos trabajos de Josep Guardiola en el Bayern Munich y del argentino Jorge Sampaoli en la selección chilena, por primera vez en su historia ganadora de la Copa América.

Para destacar, finalmente, que en la entrega del Balón de Oro a Messi, por la FIFA sólo apareció el presidente provisorio camerunés Issa Hayatou, debido a la crisis que atraviesa la entidad, que tendrá elecciones presidenciales el próximo 26 de febrero, tras los cuestionamientos al anterior mandatario Joseph Blatter, la detención de muchos de sus dirigentes por corrupción y la desestimación de la propia candidatura del anterior presidente de la UEFA, Platini, por la misma razón.


Con la FIFA como anfitriona pero casi ausente, brilló más el fútbol y en ese contexto, fue la fiesta de Messi y del Barcelona. El argentino pelea ya por ser reconocido como el mejor de la historia. Y tiene varios boletos a su favor.

1 comentario:

Unknown dijo...

EN 2006 creía que LM podría ser a futuro el mejor de la historia. En 2009 entendí que había llegado a ese lugar. Desde ahí, comenzó a poner el listón cada vez más arriba. Si Messi no hubiese existido, hoy estaríamos discutiendo si CR7 es el mejor de todos los tiempos. Creo que, por sus características, se lo compararía con Pelé.