¿Qué cambiará con la TV abierta en el fútbol?

La pregunta que formulamos en el título tiene relación con los nuevos tiempos que vienen (y no "que se vienen", porque las cosas van y vienen, pero no "se vienen"). Se abre un nuevo ciclo en la TV abierta con la transmisión de los diez partidos de los torneos de primera división desde el inicio del próximo Torneo Apertura, tal vez este fin de semana, y sería interesante conocer cómo se constituirá el staff decada uno de los canales y cómo se comunicará el fútbol a los televidentes. Con qué discurso, con qué periodistas, con qué formato, con qué ideas. Contrariamente a lo que se sostuvo desde el monopolio reinante por más de dos décadas (nos referimos, claro está, a Torneos y Competencias), la apertura de la televisación del fútbol debería implicar un aumento de las fuentes de trabajo para muchos profesionales, pero la intuición nos dice que esto no sería del todo así. ¿Qué periodismo veremos por TV? por lo pronto, se anuncia que el clásico "Fútbol de Primera" continuará, aunque con media hora menos que siempre (de 22 a 23,30) y con el mismo staff, al que se le sumaría parte del de Fox Sports, es decir, periodistas que ya formaban parte del "imperio". Más de lo mismo, aunque ahora sin necesidad de proteger secretos a voces, y con chances reales de convertirse en críticos del sistema, lo cual sería poco creíble. El gran tema pasa por lo demás. Cuatro canales con posibilidad de cuatro equipos periodísticos nuevos, sin ninguna necesidad de quedar entrampados en el discurso dominante. Si no lo estaban antes en sus telediarios, siempre nos pareció aberrante que no pudieran tener una postura crítica con el sistema, pero el hecho de tener que terminar contratando las producciones de TyC para los pocos partidos que pudieron emitir en estas dos últimas décadas, terminaba con toda chance crítica. Hoy, el desafío es fuerte: ya no se necesitará contar, obligatoriamente, con la producción de TyC, lo que habilita para dar, por fin, el salto hacia un periodismo distinto, con otra mirada, con otro compromiso, en un momento acaso fundacional. ¿Pero es posible que esto ocurra en los cuatro canales que se repartirán las transmisiones de fútbol? ¿veremos y escucharemos a relatores nuevos, no insertos ya en esta red de intereses que nos han tendido? ¿Los nombres que se manejan para las transmisiones, son realmente independientes? ¿representarán una brisa de aire fresco respecto de lo anterior?
Sería interesante que si tanto se declama la democratización del fútbol, desde la posibilidad de acceso de todos los sectores sociales a la TV gratuita, los contenidos de los mensajes también se democratizaran. De eso, escribiremos una vez que comience el campeonato y podamos saber qué hizo cada canal.
Finalmente, y volviendo al acceso a la TV gratuita para ver fútbol, una reflexión: hemos leído, escuchado y visto, comentarios opuestos a la idea de la TV pública y al "gasto" del Estado de 600 millones de pesos para este menester, cuando hay tantos problemas que solucionar. Sería interesante, como ejercicio, ir a los archivos y comprobar cuántos de estos artículos, cuántas columnas, se han escrito o dicho con la misma indignación cuando, por ejemplo, Domingo Cavallo estatizó la deuda externa privada y de repente, en un día de 1982, la Argentina pasó a deber 45.000 millonesde dólares cuando debía 22.500 millones. Es decir que lo que debían algunos, lo pagaron todos. Y no 150 millones de dólares, sino 22.500 millones de dólares. Claro, la diferencia es que aquellas eran empresas "a las que les interesaba el país", como decían en la publicidad de los programas de TV (eso sí, abierta), de Bernardo Neustadt.