miércoles, 30 de junio de 2010

Los árbitros remiten a la FIFA la polémica de la tecnología (Jornada)



Pretoria.- Una mañana nublada en el FH Odendaal High School, en una zona alejada del centro de Pretoria, donde por tercera vez desde que comenzó el Mundial, los árbitros se decidieron a dialogar con la prensa luego de su entrenamiento habitual, aunque con un aditamento: la polémica porque en el fútbol no se usa la tecnología que sí está presente en otros deportes, y que está haciendo estragos con la credibilidad del deporte rey.
Es por eso que con Roberto Suárez estuvimos presentes en la conferencia de prensa brindada por el español José María García Aranda, jefe técnico de los árbitros en este Mundial, y que remite cualquier incidencia en el juego por falta de uso de la tecnología, a la FIFA o a la International Board.
García Aranda hace oídos sordos a la insistencia periodística sobre la ausencia de los dos árbitros más cuestionados, el italiano Roberto Rosetti y el uruguayo Jorge Larrionda. Primero sostiene que no han venido “porque se encuentran en tareas recreativas” pero inmediatamente agrega que tampoco están “por decisión propia, porque no han querido estar”. En esas horas, se comenzaba a saber que ambos habían sido eliminados de este Mundial por el máximo organismo futbolístico luego de que el propio presidente, el suizo Joseph Blatter, pidiera perdón a mexicanos e ingleses por lo ocurrido en los dos polémicos partidos de octavos de final.
Por el contrario, García Aranda sostuvo que desde que comenzó el Mundial, “hubo más aciertos que desaciertos” y que el 76 por ciento de los fallos “fueron positivos” aunque rebaja sus pretensiones cuando aclara que “trataremos de aprender de esta experiencia para aplicarla en el futuro”.
García Aranda parece hablar siempre desde una posición defensiva. “Nosotros siempre enfocamos nuestro trabajo a la actuación de los árbitros y los tomamos como un sólo equipo, no nos basamos en tareas individuales”, señala.
“No sé cómo harán en otros deportes, sólo sé que en este es así y que si se pretende saber el por qué de este uso de la tecnología distinto, deben remitirse a la FIFA o la International Board”, insiste el español.
Jornada pudo dialogar con distintos árbitros en Pretoria. Uno de los más interesantes es sin dudas el experimentado colombiano Oscar Ruiz, quien recuerda que de los apenas ocho partidos que restan para finalizar el Mundial “hubo muchos más aciertos arbitrales que desaciertos” y que “siempre habrá errores porque los que reglamentaron el fútbol son hombres y los que lo implementaron son hombres, y siguen siendo hombres los que dirigen hoy”.
Ruiz señala que el fútbol “para mí es la octava maravilla del mundo” pero aclara que “no por nada, no sólo Blatter sino que anteriormente el presidente de la FIFA brasileño Joao Havelange no han querido implementar la tecnología en el fútbol”.
Consultado sobre qué aspectos novedosos del Mundial hasta ahora le han llamado la atención, hace referencia a las camisetas aerodinámicas “que no permiten que uno las pueda tomar” y pone como ejemplo al seleccionado japonés.
Ruiz prefiere no hablar mucho de la pelota “Jabulani”. “Yo no la pateo, son los jugadores los que tienen que opinar”, mantiene entre risas.
Por su parte, y en diálogo exclusivo con Jornada, el árbitro inglés Howard Webb advierte que el problema de uso de la tecnología “es que se trata de un hecho cultural porque eso llega a miles de millones de personas y es el árbitro el que paga” y por eso aboga para que los jueces de fútbol “sepan cada vez más de psicología y sociología, para conocer más a los jugadores y a la afición”. Jornada consultó a Webb sobre la frase de Blatter es que con el fútbol “administro pasión”. “Se trata de un hecho cultural único y por eso genera tanto debate”, indica.
También Jornada dialogó con el mexicano Marco Antonio Rodríguez, quien se limitó a decir que en este Mundial, los árbitros “seguimos un modelo teórico-práctico y metodológico que es el que brindan la IB y la FIFA” y al ser consultado sobre el escaso uso de la tecnología en el fútbol, sostiene que “nos dejan usar el beep y el intercomunicador”.
En cambio, el suizo Massimo Busacca, parece confiar más en sus posibilidades, en diálogo exclusivo con Jornada. “Hay que estar preparado para decidir en el campo de juego en una fracción de segundo, y yo lo estoy”.
El que no estuvo entre los jueces en Pretoria, y sin embargo va creciendo en sus posibilidades en el torneo es el argentino Héctor Baldassi, porque en el mismo día tenía que dirigir el partido entre España y Portugal en Ciudad del Cabo.
Paradójicamente, Baldassi expulsó al portugués Ricardo Costa por un codazo al lateral español Joan Capdevila, que pese a emitirse reiteradamente en distintas tomas de la televisión, no se alcanza a ver aunque siempre el fuerte del argentino fue estar cerca de la jugada. Un ejemplo de que no todo se resuelve con la tecnología, aunque sea imprescindible su implmentación.
Algunas cosas parecen ir cambiando, tal vez con menos velocidad de la imaginada, pero al menos en diálogo con Jornada, el veedor uruguayo Ernesto Fillippi aventuró que en la próxima Copa América, por jugarse en la Argentina en 2011, podría implementarse la idea del cuarto y quinto árbitros, uno detrás de cada arco.
Soluciones hay, pero siempre lejos de las pantallas electrónicas y la TV, al menos por ahora.

1 comentario:

FI dijo...

Qué tema este de la tecnología, yo creo que se debe de implementar porque ayudaría a los árbitros, no los exhibiría.