Desde Río de Janeiro
La selección brasileña se clasificó hoy para jugar
la semifinal ante Alemania, al vencer 2-1 a Colombia en Fortaleza con goles de
Thiago Silva en el primer tiempo, David Luiz, de tiro libre en el segundo, y
sobre el final hubo un cierto suspenso cuando faltando doce minutos, James
Rodríguez descontó de penal.
Brasil y Alemania animarán una gran semifinal en
Belo Horizonte el próximo martes 8 de julio.
El equipo brasileño salió a dominar el partido de
entrada con mucha psicología, algo que se había hablado en demasía durante la
semana, y no dejó espacios a su rival, que pareció no ser el que fue durante
gran parte del Mundial.
Brasil además se encontró pronto con el gol de Thiago
Silva, entrando por el segundo palo y empujando la pelota a la red con su
tobillo, y esa distancia lo ayudó para seguir presionando a Colombia en todos
los sectores y mantener la diferencia.
Colombia nunca tuvo espacios para jugar, con una
dura marca de los locales en toda la cancha y así es que ser mantuvo el
resultado hasta el segundo tiempo con la misma tónica hasta que David Luiz, con
un gran tiro libre recto al arco,
aumentó la diferencia.
En ese momento, cuando quedaba media hora para el
final, el resultado a favor de Brasil parecía indescontable, pero gracias a un
penal de James Rodríguez, Colombia logró descontar cuando quedaban doce minutos
y tomó cierto impulso para tratar de empatarlo, aunque sin haber encontrado
nunca el estilo y el juego que lo caracterizó.
El director técnico argentino José Pekerman, al caer
derrotado, quedó al borde de batir el récord de imbatibilidad en los mundiales.
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